Algo.

Encontraos aquí. En el mundo perdido. El límite de lo real y lo imaginario.

28.10.10

He caido. Otra vez.


¿Por qué ostias me doy cabezazos con lo mismo una y mil veces?¿No aprendo nunca o qué?.
Estoy hasta las narices de esto. De que te comportes como un perfecto hipócrita. Porque oh Dios lo eres.
Me parece alucinante que utilices cosas que aparecen en los libros que te dejé para creerte guay cuando te pedí que me los devolvieses y pasaste del tema, que te vayas a BCN cuando cuesta una pasta y nunca hacías ningun esfuerzo por venir a verme, porque era muy caro.
Y el dinero no cae del cielo.
Paso, PASO PASO.

Que te den por SACO, por no decir otra cosa.


20.10.10

Necesitaba escribir.


Hice lo que no debía.
Me dejé llevar por un impulso y cuando quise darme cuenta le había dado a ''Enviar mensaje''.
ME dejé llevar por la euforia de estar escuchando Sultans Of Swing de Dire Straits.
Y lo hice. Rompí el delicado hilo que quedaba, o lo que no quedaba. Lo rompí. Se fue, porque él quiso irse. Problema suyo.
Me da igual. A la mierda todo.

We are sultans of Swing.



19.10.10

Algo.


Podría contar muchas cosas, como por ejemplo...por qué dejé de creer en la gente.
Dejé de creer un día de Diciembre. Hacía una ventolera espantosa y me lloraban los ojos.
Crucé un paso de peatones y lo vi.

29.8.10

Lo que nunca me atreví a contar 1.

Vivo en un piso, y enfrente hay un parque. Un parque con mucho césped dónde los ancianos pasan horas dando de comer a las aves y los niños corretean a sus anchas e incluso hay columpios y toboganes.
También hay bancos, árboles y una fuente.
La fuente es...de piedra y el agua sale por un tubo. Siempre está fría y te hace sentir mejor cuando la bebes. Es muy transparente.
Podría pasarme horas mirando el chorro incesante de agua que cae, me hipnotiza.

-¡Joder Margot!, deja de mirar el agua como si fueses tonta-dijo mi no hermana.
-¿Por qué? Hago lo que me da la gana, y la que parece que es tonta eres tú al gritarme de esa forma.
Ni siquiera esperé el tortazo. Le escruté con la mirada y me la jugué, le miré fijamente a los ojos y supo lo que pretendía hacer, pero era tarde. Demasiado tarde.


26.8.10

=.=



Margot quería gritarle y decirle lo que realmente pensaba.
Decirle lo que no podia debido a su cabezonería, a sus ganas de hacer daño, a sus comentarios indirectos.
Esta vez se había pasado. Lo gracioso es que se describía a si mismo.
A Margot le encantaría que dejase de ver la paja en el ojo ajeno cuando ni siquiera veía la viga en el suyo propio, que dejase de ir de guay, de hacerle daño.


25.8.10

'.'


Margot se sintió extrañamente idiota cuando vio ese comentario.
Le costaba respirar. No sabía por qué había ido allí, porque intuía lo que podía encontrar. Y no le gustaba.
Se sintió la peor persona del mundo cuando su dignidad empezó a descender, por ser incapaz de decir no.
En el fondo no sabía si quería decirlo, lo que no quería era complicarse más. No hacer daño.
Se sintió una idiota cuando vio que nada había cambiado entre ella y ella.
Se sintió como una inútil cuando la dependienta del Corte Inglés le explicaba por segunda vez dónde estaba una calle conocida, pero que ella no sabía ubicar.
Se sintió como una gorda al comerse media tableta de chocolate ella sola.
Se sintió sola cuando deseó que alguien le protegiese.
Se sintió como una subnormal cuando se dio cuenta de que era una débil mental.
Maldita Adolescente